Revista Killkana Sociales Vol. 6, No. Esp., diciembre, 2022
Consecuencias adversas en el apren-
dizaje por el uso inadecuado de las
herramientas tecnológicas actuales
Adverse consequences in learning due to the
inappropriate use of current technological tools
Resumen
La tecnología dentro del plano educativo, puede ser entendida como el conjunto de recursos,
procesos y herramientas relacionadas con las Tecnología de la Información y la Comunicación
(TIC), diseñadas para lograr los alcances que cada institución proyecta, sin descuidar las
estrategias emanadas desde el sistema educativo en sus diversos espacios y niveles. El
objetivo del trabajo es documentar publicaciones relacionadas con el uso y abuso de las TIC,
en el proceso enseñanza-aprendizaje en cualquier nivel educacional. La metodología es de tipo
documental, empleando a la hermenéutica como método analítico. Los resultados denotan que
las consecuencias adversas producto del uso incorrecto de las TIC se destacan: distracción y
dispersión de los alumnos dado las innidades de opciones existentes que los conduce hacia
áreas no productivas como, por ejemplo, los juegos en línea. Acumular excesiva información
produce un desbordamiento en cuanto a la cantidad de conocimiento, dejando a un lado el
uso correcto de elemento de saturación que cada estudiante de conocer para determinar
en qué momento debe parar la búsqueda. Las conclusiones destacan las innidades de
informaciones poco conables en la red, que cuando no son vericados ocasionan distorsiones
en las diversas contextualizaciones que el alumno aborda. Los trabajos que presentan por lo
general los estudiantes, son copias de textos encontrados en la Web, perdiéndose el sentido
investigativo que enriquezca el conocimiento alimenta la falta de creatividad. Para que la
información digital se convierta en conocimiento efectivo, es importante que los educadores
se apropien en la reconstrucción del aprendizaje integral.
Palabras clave: creatividad, phubbing, rendimiento académico, tecnología, TIC
Pérez Gaibor Nancy Concepción¹*; Peña Patricia Moraima¹
1 Universidad Estatal de Bolívar
* nperez@ueb.edu.ec
DOI: https://doi.org/10.26871/killkanasocial.v6i4.1196
Artículo original. Revista Killkana Sociales.Vol. 6, No. Esp., pp. 139 - 150 , diciembre, 2022.
p-ISSN 2528-8008 / e-ISSN 2588-087X. Universidad Católica de Cuenca
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Abstract
Technology within the educational field can be understood as the set of resources,
processes and tools related to Information and Communication Technology (ICT), designed
to achieve the scope that each institution projects, without neglecting the strategies
emanating from the educational system in its various spaces and levels.
The objective of the work is to document publications related to the use and abuse of
ICTs, in the teaching-learning process at any educational level. The methodology is of a
documentary type, using hermeneutics as an analytical method. The results denote that
the adverse consequences resulting from the incorrect use of ICT stand out: distraction
and dispersion of students given the infinity of existing options that leads them to non-
productive areas such as online games. Accumulating excessive information produces
an overflow in terms of the amount of knowledge, leaving aside the correct use of the
saturation element that each student knows to determine when the search should stop.
The conclusions highlight the infinities of unreliable information on the Internet, which
when not verified cause distortions in the various contextualization that the student
addresses. The works that students generally present are copies of texts found on the
Web, losing the investigative sense that enriches knowledge feeds the lack of creativity.
For digital information to become effective knowledge, it is important that educators take
ownership in the reconstruction of comprehensive learning.
Keywords: creativity, phubbing, academic performance, technology, ICT.
1. Introducción
La denición amplia de tecnología se reere a una colección de herramientas,
procesos y estrategias utilizadas en el sistema, el inventario y emisión de información.
Estas herramientas, procesos y técnicas se denominan Tecnologías de la Información y
Comunicación (TIC), o herramientas, procesos y sistemas de soporte, que tienen como
objetivo optimizar la comunicación. El advenimiento de la World Wide Web (www) en la década
de los 90 y el auge de las computadoras de uso general; sentaron las bases para el desarrollo
de Internet en 1969. Más tarde, aparecieron el correo electrónico, sitios web, blogs y videos de
YouTube. Le siguieron los videojuegos, redes sociales y sitios tales cual MySpace, Facebook,
LinkedIn y Twitter (Caro, 2017).
Se deende la integración de las TIC en el ámbito de enseñanza conforme con la
creación de innovadores entornos cognitivos y redes de conocimiento en lugar de solo como
herramientas más débiles para el intercambio de información (Manrique et al., 2018). La idea
de integrar diversos modelos tecnológicos en los entornos de enseñanza y aprendizaje ha
suscitado recientemente una serie de reacciones, desde quienes creen que milagrosamente
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tecnológicas actuales
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su introducción eliminará todas las deciencias y desafíos del sistema educativo hasta
quienes satanizan recursos tecnológicos, creyendo que tienen la posibilidad de inuir en la
relación que poseen maestros y alumnos (Flores, 2018).
Dentro del área educativa, al hablar de TIC se ha asumido un papel protagónico y
han sustituido en gran medida a las tecnologías de la información y la comunicación como
tecnologías relacionadas con el aprendizaje. Los benecios del uso son los siguientes, tal
como se enumeran en la literatura referenciada: refuerzan la comunicación interpersonal,
facilitan las actividades en equipo, permiten el monitoreo individual y grupal de las actividades
del grupo, posibilitan el acceso a los materiales de aprendizaje, permiten que los estudiantes
administración, y facilitan el desarrollo de actividades para la autoevaluación (Vázquez y
Masero, 2016).
A pesar de esto, el indiscutible progreso actual de la tecnología no se encuentra libre
de inconvenientes dirigidas a personas que han usado la tecnología a causa de una necesidad
ininterrumpida, el centro de sus vidas y un pedazo importante de su tiempo. Esto ha llevado
a la interferencia con las obligaciones diarias y se ha convertido en una verdadera sujeción,
que es a lo que la mayoría de la comunidad cientíca tecnológica se reere como abuso de las
TIC (Terán, 2019). Dado que este problema se observa a nivel mundial, ha habido un aumento
notable en la literatura cientíca en los últimos años. No obstante, según un estudio realizado
en Europa, los sujetos armaron no poder controlar la utilización de diferentes recursos
tecnológicos, con un 23,8% informando que lo han intentado de manera que han fracasado
(Fundación MAFRE, 2019).
En Europa la situación de la Internet se mantiene diversa, donde 1,98% en jóvenes
noruegos hasta el 9,6% de adolescentes australianos mantienen una cierta hegemonía en su
uso. En Latinoamérica investigaciones dadas sobre Perú, denotan un 7% de predominación
adictiva de usuarios en la red, a la vez que en Colombia hasta el 2007 donde se carecía de la
existencia de reportes sobre estudios a cerca de la preponderancia digital y de los móviles
(Redondo et al., 2016). Una investigación enfocada en México acerca de trastornos adictivos
a Internet se consiguió hallar que más del 50% de la población seleccionada expuso un
excedente acerca del tiempo que se emplea utilizando la internet. (Hernández et al., 2016;
Méndez et al., 2018).
Según los informes, Ecuador está entre los países que no han prestado mucho interés
sobre estos temas, pero los informes también arman que los ecuatorianos son los que
menos conocen los peligros presentes en las redes sociales de todos los países estudiados
(Franco, 2013). Es importante tener en cuenta que las plataformas de redes sociales se utilizan
actualmente con nes educativos y son accesibles para todos los estudiantes debido a la
pandemia de COVID-19 (Mendoza et al., 2020; Suryasa et al., 2020).
La nalidad de la indagación es documentar publicaciones en relación con la utilización
y abuso de las TIC, en el proceso enseñanza-aprendizaje en cualquier grado educacional, al
costado de una meditación teórica de los términos usados.
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2. Metodología
Se realizó una metodología netamente de revisión bibliográca, los documentos
revisados fueron acerca del uso y abuso de las tecnologías utilizadas en el proceso
enseñanza-aprendizaje en cualquier nivel de la educación, con este propósito se utilizó
la opción de búsqueda avanzada del Google Académico, con punto de partida de los
términos: uso y abuso, uso excesivo, adicción, adicciones comportamentales, adicciones
no farmacológicas. Se encontró una enorme producción cientíca y se renó todavía más la
averiguación, concretándola en el periodo del 2016 y 2020. De ciertos artículos detectados se
consultaron varias de las referencias citadas, las cuales constituyeron fuentes secundarias
de interés, utilizando la hermenéutica para los exámenes de los resultados, discusiones y
conclusiones.
3. Resultados Usos de las TIC en el ámbito educativo
Es incuestionable que se vive una época de cambio social debido a la inuencia
de las TIC, las cuáles proporcionan muchas ventajas referentes a movilidad, información,
entretenimiento e interacción social. En el entorno social, político, económico y cultural del
siglo XXI, donde se otorgan cita la sociedad del entendimiento, las TIC y la multiculturalidad,
son sistemas de enseñanza convencionales incapaces de atender la demanda, muchísimo
más si se piensa en enseñanza por medio de toda la vida, enfrentando enormes desafíos en
cuanto a cobertura, calidad y adhesión digital (Ramírez, 2015; Acuña, 2016).
El término Nuevas Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (NTIC) en
educación, se reere a una colección de avances contemporáneos en TIC que incluyen
una serie de aplicaciones cientícas con una capacidad cada vez más sosticada para el
procesamiento de información en su núcleo. Estas herramientas, plataformas y canales
se utilizan para gestionar y acceder a la información. Los tres campos de la informática, la
información y las comunicaciones han sufrido muchos cambios extraordinarios en el mundo.
El uso de las NTIC en el desarrollo de aprendizaje permite atender de forma más ecaz
las diferencias individuales, favoreciendo una mayor exploración de las potencialidades de
cada persona y teniendo en cuenta también a las personas con discapacidad funcional o
anatómica, así como a las más talentosas y creativas.
La Educación se mantiene en constante actualización de modelos de enseñanza,
con el n de afrontar los desafíos de la revolución cientíca y tecnológica, destacando el
alcance del aprendizaje que permita la interacción para reforzar los procesos de enseñanza–
aprendizaje; fomentar el aprendizaje y la creación cooperativa. Desarrollar proyectos socio-
educativos; crear contextos culturales; producen acción; compartir cualquier información
instantánea; desarrollar nuevos modelos de educación; contribuir a los individuos a obtener
nuevos conocimientos; estimula la comunicación multicultural entre estudiantes y maestros
de varios territorios; amplía las oportunidades de educación y aprendizaje; sirve para mediar,
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coordinar y relacionar contenidos que se hacen conforme a las edades de los usuarios y los
instrumentos tecnológicos.
Asimismo, la utilización de los instrumentos innovadores posibilitan un desarrollo
persistente, constante, dinámico, participativo y activo de los alumnos, sin dejar de lado las
tendencias pedagógicas que fundamentan la enseñanza. Favorecen el trabajo colaborativo
en conjunto al compartir ordenador con un compadre y por la necesidad de disponer de los
otros en la consecución exitosa de las labores encomendadas por el instructor. Supresión de
las barreras espacio- temporales entre el maestro y el alumno. Respaldan la implementación
de contenidos educativos y curriculares a manera de Objetivos de Aprendizaje (OA), en todos
los niveles de educación, a partir del primario hasta el universitario y posibilita obtener
información acerca de cómo interactúan los alumnos con el contenido, con los materiales
de aprendizaje, así como con las redes sociales que están compuestos, la relación con el
profesorado, con los compañeros (De la Torre y Domínguez, 2012)
A nales del siglo XX se distinguieron el uso sobre el apoyo el proceso de aprendizaje
de los alumnos, crea un ambiente interactivo y creativo, permite que el docente intervenga
como facilitador durante el proceso de aprendizaje de los alumnos, eleva el nivel de motivación,
concentración y autocontrol del estudiante, permite el auto enseñanza y racionaliza el tiempo,
vincula el aprendizaje conductista con el constructivista y accede que el maestro prevea los
procesos cognoscitivos que el alumno fortalece una vez que está en relación con la multimedia.
Según la UNESCO, en el seguimiento del uso de las TIC en la educación se incluyen las
siguientes metas internacionales, que se están cumpliendo en muchos países. La integración
de las TIC en la educación en colaboración con el sector privado cuyo uso mejora la calidad
de los resultados educativos y promueve reformas educativas considerando la promoción de
la equidad y la educación inclusiva. El uso de las TIC ayuda a los estudiantes a desarrollar
habilidades y competencias laborales (Cuero, 2017). En relación a esto, Cabero (2002) arma
que el uso de las TIC permite al docente realizar aplicaciones didácticas sencillas, sin tener
un conocimiento profundo de programación o de intrincados mecanismos de información,
posibilitando así un cierto nivel de interacción con los estudiantes.
Abuso de las Tecnologías Conceptualización del término
Hace años, al momento que las personas comenzaron a usar sus manos para agarrar,
jalar y manejar herramientas como rocas y plumas, ocurrieron transformaciones en la
composición estructural del cerebro y el sistema nervioso de los varones. No obstante, el
testimonio de estas alteraciones o agravio en el cerebro. El desarrollo que pueden provocar
las nuevas tecnologías sólo se está realizando a través de solicitudes de patentes años o
décadas posterior de su uso (Trahtemberg, 2000).
El desarrollo tecnológico incuestionable no está exento de desafíos, ya que cierta gente
ha hecho un uso constante de estas tecnologías el centro de sus vidas y una parte importante
de su tiempo, hasta el punto en que interere con el cumplimiento de las obligaciones diarias
y se convierte en una verdadera adicción. El término abuso de las TIC ha recibido una variedad
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de otros nombres, que incluyen adicciones, adicciones conductuales, socio adicciones,
adicciones tecnológicas, ciberadicción, uso excesivo, adicción problemática (Terán, 2019). En
cambio, para Franco (2013), la relación que el sujeto establezca con su consumo determinará
si es probable que desarrolle una adicción; podría ser pasivo, tal como mirar al televisor, o
activo, como jugar a la computadora o por la Internet.
El enfoque del abuso sería mantener el comportamiento empero las dicultades
sociales, interpersonales, profesionales o académicas que posiblemente surjan para el
individuo. El término Adicciones a las TIC, se reere al uso compulsivo, repetitivo y prolongado
que tiene un impacto negativo en la salud, así como en la vida social, familiar, académica y
gremial. Los indicios de la adicción a la tecnología son semejantes a las demás adicciones,
quiere decir que abarca la pérdida de control, variación de la vida cotidiana y sometimiento
psicológico (Gimeno, 2018; Pereira y Sánchez, 2016).
El diccionario de la Real Academia Española dene la adicción como la necesidad
incontrolable de una persona de consumir uno o más químicos nocivos o a su vez participar
en determinados videojuegos; por el contrario, la dependencia es la necesidad compulsiva
de una persona de usar una sustancia como el alcohol, tabaco y drogas para sentir las
sensaciones o aliviar la angustia causada por su privación. El abuso, por otro lado, se reere
al uso inapropiado o inadecuado. Algunos autores arman que el uso excesivo de las TIC no
amerita la etiqueta de adicción y señalan que se ha exagerado la cobertura mediática de
este tema. Es posible armar que estas adicciones no existen ocialmente y que existe una
controversia en curso porque ni la Clasicación Internacional de Esferas (CIE-10) ni el término
adicciones tecnológicas parecen reconocerlas como enfermedades. Es importante señalar
que las clasicaciones sólo reconocen el juego (ludopatía) como una enfermedad.
Una adicción conductual es una actividad que, si bien inicialmente es agradable o
beneciosa para la vida de un individuo, eventualmente se convierte en algo dañino. A pesar
de ser consciente de este hecho, el individuo es incapaz de abandonar la adicción, y también
extravía la facultad de controlar y tomar decisiones acerca de su comportamiento. Como
resultado, el individuo desarrolla una obsesión que consume la mayoría de sus intereses o
actividades, dejando atrás las otras actividades.
Una de las pioneras intenciones con el propósito particular de denir la adicción a
Internet fue realizado por el psicólogo Goldberg (1995), quien propuso un conjunto de criterios
de diagnóstico para la adicción a Internet (IAD) que se basaban en criterios de diagnóstico
de abuso de drogas. Young (1996) estableció un conjunto de criterios diagnósticos para el
síndrome IAD, caracterizándose como una disminución en el control de su uso que se expresa
como un grupo de síntomas cognitivos y físicos. Según Terán (2019), una persona dependiente
de internet hace un uso excesivo de internet, lo que hace que pierda el enfoque en sus objetivos
personales, familiares o profesionales.
La vida cotidiana normal de los adolescentes se ve negativamente afectada por el uso
descontrolado de la tecnología, lo que hace que descuiden sus responsabilidades académicas,
profesionales y/o domésticas en favor del mundo virtual (Díaz-Vicario et al., 2019). Otra adicción
que se menciona en la bibliografía es el phubbing, que es la acción de devaluar a la gente
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prestando más concentración a un dispositivo tecnológico, dicho de otro modo, ignorando a
los que están frente a ti por usar un teléfono móvil y a los que se encuentran cerca por prestar
una mayor importancia a los dispositivos (Villafuerte y Vera, 2019).
Hay signos de abuso de tecnología que González y Herrero (2019), lo conducen hacia
ciertas dependencias psicológicas, pero no a un comportamiento adictivo. También podría
clasicarse como un trastorno adictivo si cumple con los criterios diagnósticos del Manual de
Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-IV), como la abstinencia, la escasez
de autocontrol y cuestiones relacionadas. Otro factor es la adicción a los videojuegos, que
tiene un historial de uso excesivo o abusivo sin llegar a convertirse en una verdadera adicción.
En palabras de los autores, se trata de una conducta adictiva con una sintomatología que,
a pesar de no estar conrmada, es expuesta por los síntomas como: depresión, ansiedad y
agresividad.
A juicio de Pereira y Sánchez (2016), los síntomas de la adicción a las nuevas
tecnologías son similares a los de otras adicciones, distinguiéndose la pérdida de control,
las alteraciones de la vida diaria o la dependencia psicológica. Después de usar Internet
en exceso, algunas personas desarrollan comportamientos y patrones de pensamiento
anormales. En concordancia con Méndez et al. (2018), entre estas anomalías se encuentran
los trastornos obsesivos, compulsivos, dependencia, pérdida de control sobre su uso, apatía y
falta de responsabilidad en el trabajo o el abandono de las relaciones sociales cercanas.
Los síntomas físicos como astenia, desnutrición, cefalea, fatiga ocular, tensión,
contracturas musculares, insomnio, hipersomnia, sedentarismo, sobrealimentación y
obesidad son frecuentemente y señalados en la literatura. A nivel psicológico sobresalen:
desnutrición afectiva, ansiedad, inestabilidad emocional, depresión, impaciencia, dicultades
de aprendizaje, confusión sobre el mundo real y/o imaginario, además la rabia. Como punto
nal, a nivel social, se pueden encontrar con la inmadurez, incumplimiento de los deberes
familiares, académicas y legales.
4. Discusión
Los resultados devenidos desde el diseño del cuestionario MULTICAGE-TIC, se basa
en preguntas sobre comportamientos compulsivos que se han utilizado en numerosos
estudios previos sobre adicciones conductuales. También incluye escalas de interpretación
que permiten establecer criterios diagnósticos con características psicométricas para
determinar la presencia de problemas. De ideal forma, el Cuestionario General de Salud,
identica signos de malestar psicológico y posibles problemas psicológicos. Adicionalmente
la Escala de Estrés Percibido (EEP) mide qué tan preocupados se sienten los encuestados, a
diferencia de qué tan bien equipados están para manejar situaciones personales desaantes.
En este mismo orden de ideas, el Cuestionario de Conductas Asociadas al Uso de TIC
(CAU-TIC), incluye preguntas para detectar conductas y posibles consecuencias derivadas del
uso y el mal uso de las TIC, y el Inventario de Síntomas Prefrontales se utilizan para determinar
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síntomas relacionados con alteraciones neuropsicológicas relacionadas con la corteza
prefrontal que pueden detectar conductas y posibles consecuencias derivadas del uso y el
mal uso de las TIC.
El Inventario de Uso de Apps mide con qué frecuencia y cuántas veces los jóvenes
encuestados utilizan las ochenta y una aplicaciones de internet. El cuestionario Internet
Addiction Trastorno consta de 20 ítems con respuestas en escala de Likert que evalúan el
grado de uso de internet y cómo afecta la rutina diaria, la vida social, la productividad, los
sueños y los sentimientos (Casas-Mas, 2018).
Todos ellos denotan el uso problemático de los teléfonos móviles y sus efectos
psicológicos han llamado la atención en la literatura cientíca, el cual se han discutido
ampliamente los criterios diagnósticos de las adicciones conductuales. Los efectos de esta
plataforma digital se pueden ver en la bibliografía bajo una variedad de nombres, entre ellos:
el síndrome de la doble vericación, síndrome de la fantasía vibratoria, ciber mareo, depresión
de Facebook, ciber hipocondría, efecto Google, síndrome phubbing, solo por nombrar algunos.
Estos factores son evidentes en Europa, donde numerosos estudios realizados han
arrojado una variedad de resultados, tales como: uso de la escala de problemas móviles la
cual reveló puntuaciones más altas de neuroticismo y niveles más bajos de autoestima. La
adicción al teléfono móvil estaba inversamente relacionada a la autoestima y directamente
ligado a la búsqueda de sensaciones y excitación; generando una correlación positiva entre la
duración del uso y la percepción. También descubrieron que las mujeres usaban los teléfonos
móviles con más frecuencia que los hombres, determinado mediante la Escala de Afecto
Positivo y Negativo (PANAS).
Los cuestionarios de Personalidad de Eysenck y reacciones en general del uso de
teléfono móvil, se localizó una interacción entre psicoticismo e inhibición rebajada sobre
la utilización en los entornos sociales y que el neuroticismo y la extraversión inuyen en el
mismo. Con la investigación de los patrones de comportamiento detectaron que la mayor
parte de los adolescentes usaban la tecnología, como táctica de afrontamiento de estados
emocionales negativos como por ejemplo tedio o disforia; generando adversidades hacia el
estado de ánimo, ansiedad, sentimiento de inseguridad, temor a salir, tener que regresar a
por él si se descuida y/o al no ser capaz de vivir sin el celular (Olivencia-Carrión et al., 2016).
El uso problemático de los dispositivos móviles y sus efectos psicológicos han
llamado la atención en la literatura cientíca, donde se han discutido ampliamente los
criterios diagnósticos de las adicciones conductuales. Un estudio realizado en México llegó
a la conclusión de que sería útil enfocarse más sobre el tema de la adicción a las nuevas
tecnologías y tener una terminología clara porque, de momento, es imposible hablar de
adicción (Pereira y Sánchez, 2016).
Se investigó la prevalencia de adicción a las TIC en Ecuador, arrojando resultados
de 62,9% en general al enfocarse en la prevalencia de los estados ansioso y depresivos,
respectivamente (Olivencia-Carrión et al., 2016). Se practicaron clasicaciones de los riesgos
asociados con las TIC, destacando para la salud física y mental (deterioro de la memoria o la
capacidad organizativa, problemas físicos e insomnio) y de personalidad social (pérdida de
conciencia del tiempo, tendencias consumistas, falta de seguridad, aislamiento, inexistencia
de actividad natural y exclusión de usuarios no tecnológicos) (Torres y Ugalde, 2012).
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5. Conclusiones
Existe una brecha en nuestra comprensión de los efectos del uso y exceso de las
innovadoras tecnologías en la enseñanza en todas las edades de instrucción, dominando el
continente americano, lo que deja demasiado sendero por abarcar en nuestra comprensión
y categorización de esta inédita enfermedad. El uso problemático de los teléfonos móviles
y sus efectos psicológicos han llamado la atención en la literatura cientíca, en el que los
puntos de vista que han sido diagnosticado para las adicciones conductuales han sido con
creces discutidos en investigaciones hechas en varios países, dentro de estos Ecuador.
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Recibido:
9 de julio de 2022
Aceptado:
15 de noviembre de 2022
150 Nancy Pérez y col.
Revista Killkana Sociales Vol. 6, No. Esp., diciembre, 2022