Artículo Editorial. Revista Killkana Sociales.Vol. 5, No. 1, pp. I - III , enero-abril, 2021.
p-ISSN 2528-8008 / e-ISSN 2588-087X. Universidad Católica de Cuenca
Docencia en servicio y medicina
comunitaria
Carmen Miluska Alegría-Bernal
1
*
1
Centro de Salud Javier Llosa García-Arequipa-Peru.
* miluale_70@live.com
DOI: 10.26871/killkanasocial.v5i1.1193
La docencia universitaria es una profesión muy compleja, porque tiene la
función de formar a los nuevos recursos humanos de la sociedad, tratando de lograr
cubrir la demanda de las profesiones de la sociedad y con una mirada hacia el
horizonte de las nuevas ocupaciones que todavía no tienen demanda pero que se
necesitarán a futuro.(Gorrochotegui, 2005)
En Latinoamérica se ha realizado un movimiento en la educación superior en
1918 en la ciudad de Córdoba-Argentina que ha tenido como principal misión la
democratización de la educación superior, de ahí que en esta parte del continente
hay una gran tradición de educación superior gratuita solventada por el estado.
(Donoso, 2020)
Otros logros de la reforma de Córdoba son, la inviolabilidad de la autonomía
universitaria, la participación del tercio de estudiantes en el co-gobierno de las
instituciones superiores de estudios, la extensión universitaria conocida ahora como
responsabilidad social universitaria o vinculación con la comunidad, la periodicidad
de las cátedras ( cátedra paralela) y los concursos por oposición y méritos. En Perú
este movimiento social pedagógico, tuvo personajes ilustres como Jorge Basadre
Grohman, Raúl Porra Barrenechea, Víctor Raúl haya de la Torre y José Carlos
Mariátegui. La juventud estaba en contra del modelo escolástico, hegemónico y pro
imperialista que había heredado la universidad moderna de los claustros
universitarios del siglo XVII. Esta reforma introduce la obligatoriedad de que la
universidad responda a las necesidades de su zona de influencia, a su territorio; en
ese sentido la docencia en medicina comenzó a incorporar de manera gradual la
docencia en comunidad llamada Medicina Comunitaria. (Ruiz, 2011)
En el caso de la medicina, el modelo docente se basó siempre en la
transmisión de conocimientos del maestro al discípulo en el ámbito hospitalario
(docencia en servicio), donde el practicante de medicina tenía que aprender sobre
las patologías más prevalentes de su región en base a la observación de los casos
atendidos en el nosocomio y alguna que otra vez se aprendía sobre una enfermedad
foránea dada la poca migración y movilidad de los pueblos en esos tiempos. Las
competencias que se aprendían eran cómo evaluar, cómo clasificar, cómo decidir y
cómo tratar la enfermedad. (Romero, 2014)
Revista Killkana Sociales Vol. 5, No. 1, enero-abril, 2021
II Carmen Miluska Alegría-Bernal
Luego de la reforma de Córdoba, las universidades se tiñen de compromiso
social con la comunidad y aparece la medicina comunitaria en una parte del
continente y la medicina social en otro. La primera con una visión epidemiológica del
proceso salud enfermedad y apostando por la promoción de la salud en su
componente educación para la salud y la segunda con una visión crítica y contra
hegemónica, replanteadora de las estructuras de la sociedad, como un antecesor de
las determinantes sociales de la salud, luego propuesta por Michael Marmot ante la
OMS y que actualmente tiene la hegemonía y es la versión oficial de lo que los
organismos multilaterales reconocen como las causas de las causas.(Ruiz, 2011)
Queda claro que luego la docencia en servicio se nutrió de una técnica que
se llama la medicina basada en evidencia y que actualmente es el paradigma
epistemológico de la práctica de la medicina y de la formación de recursos humanos
en salud, que tiene como principal misión la optimización economicista de la
administración de recursos en la producción y distribución de atenciones de salud,
basando sus decisiones en la mejor evidencia científica disponible, llámese
revisiones sistemáticas de literatura con metanálisis. (Carbone, 2019; Iriart, 2002;
Junquera, 2022)
Mientras tanto, la medicina comunitaria ha pasado por 3 modelos
epistemológicos, el primero enfocado en la triada epidemiológica y el conocimiento
de la historia natural de la enfermedad, luego en un segundo momento por la
aplicación masiva de vacunas y antibióticos, imponiéndose coberturas poblacionales
que nunca llegaban a cumplirse, dada la naturaleza creciente de la población y a
partir de la declaración de Alma Ata y de las reformas planteadas por Marc Lalonde,
se llegó a la conclusión que la prevención de las enfermedades con estilos de vida
saludables era la clave del éxito para combatir las enfermedades y finalmente el
último modelo epistemológico es el que presenta que hay determinantes sociales del
proceso salud enfermedad, tales como el lugar de residencia, el tipo y lugar de
trabajo, la recreación, la educación, el ingreso económico y el acceso a los servicios
de salud.(Carbone, 2019)
Si bien la docencia en servicio ha encontrado su mejor forma de generar
información, usar información y predecir los resultados clínicos en los pacientes, la
medicina comunitaria todavía no tiene una herramienta con igual potencia, tal vez
las nuevas generaciones de médicos deban ser formados en aspectos sociales,
económicos y políticos para poder actuar de manera eficiente sobre las
determinantes sociales de la enfermedad, de acuerdo con el modelo epistemológico
vigente, por ahora la especialidad que cubre esa necesidad es la del médico
salubrista.
Revista Killkana Sociales Vol. 5, No. 1, enero-abril, 2021
III Carmen Miluska Alegría-Bernal
Referencias Bibliográficas:
Carbone, F. (2019). Alma Ata: experiencias que validan sus propuestas 40 años
después, para proyectarlas al futuro.
An. Fac. Med.
,
80
(2), 222–228.
Donoso, A. (2020). Movimientos estudiantiles en América Latina (1918-2011):
aproximación historiográfica a sus rasgos compartido.
Revista Brasileira de
Historia / Orgao Da Associacao Nacional Dos Professores Universitarios de
Historia, ANPUH
,
40
(83). https://doi.org/10.1590/1806-93472020v40n83-11
Gorrochotegui, A. (2005). Compromisos de la docencia universitaria.
Educación Y
Educadores
,
8
, 105–121.
Iriart, C., Waitzkin, H., Breilh, J., Estrada, A., & Merhy, E. E. (2002). Medicina social
latinoamericana: aportes y desafíos. Rev Panam Salud Pública, 12(2), 129.
Junquera, L. M. (2022). Medicina basada en la evidencia (MBE): Ventajas.
Revista
Española de Cirugía Oral Y Maxilofacial
,
25
(5), 265–272.
Romero, L. A. (2014). El Instituto de Investigaciones Médicas y Alfredo Lanari: Una
tradición de investigación clínica médica (1957-1976).
Revista Americana de
Medicina Respiratoria
,
14
(3). https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/ISSN 1852 -
236X
Ruiz, L. M. (2011). La Reforma de Córdoba y el gobierno de las universidades públicas
en América Latina. Análisis comparado de cinco universidades.
Dialnet
,
6
(12),
6–40.
Revista Killkana Sociales Vol. 5, No.1, enero-abril, 2021